Jam谩s un contrato gener贸 tanta felicidad. Y no hablo de los tant铆simos ceros que hay en su cuenta bancaria. Cuando Russell Wilson lleg贸 a los Pittsburgh Steelers, nadie sab铆a exactamente qu茅 esperar. Despu茅s de un turbulento periplo en Denver, el quarterback parec铆a una sombra del jugador que llev贸 a los Seattle Seahawks al Gran Baile. Pero ahora, tras trece semanas de temporada, nos est谩 demostrando a todos que su toque con el ovoide jam谩s estuvo oxidado. Simplemente llevaba un tiempo apagado.
Su relaci贸n con los Broncos se convirti贸 en un matrimonio abocado al fracaso desde su comienzo. Su hist贸rico contrato de 245 millones de d贸lares por cinco a帽os con Denver sesg贸 un camino del cual se olvid贸 disfrutar. De hecho, ni se le permiti贸. Los resultados estuvieron muy lejos de las expectativas con un r茅cord de 11-19 en dos temporadas y estad铆sticas personales que parec铆an pertenecer a otro jugador. Tanto fue as铆 que la ruptura lleg贸 antes de la temporada 2023, encajando una penalizaci贸n r茅cord de 85 millones de d贸lares contra su tope salarial.
Russell encontr贸 una segunda oportunidad con los Steelers, quienes lo adquirieron por el precio simb贸lico de poco m谩s de un mill贸n, mientras que Denver a煤n le deb铆a 39 millones de este a帽o. A priori, una apuesta arriesgada para Pittsburgh, pero que ahora se siente como un acierto total. Todo ello gracias a las directrices de uno de los mejores entrenadores de esta liga: Mike Tomlin. Con 茅l, Wilson parece haber encontrado el equilibrio y la estabilidad que tanto 茅xito le gener贸 en el pasado.
Es evidente que ya no es el mismo jugador que maravill贸 en Seattle, pero estos partidos en Pittsburgh han servido para retrotraernos a su talento de f谩brica. La semana anterior, ante los Bengals, Russell Wilson lanz贸 para 414 yardas -su mayor cifra en la temporada- y sum贸 tres touchdowns. Fue el segundo mejor registro de yardas por pase en su carrera, solo superado por las 452 que consigui贸 con los Seahawks en 2017.
Lo m谩s destacado no solo ha sido su brazo, sino su eficiencia. Wilson est谩 registrando su tasa de pases completos m谩s alta desde 2020 y su promedio de yardas por intento es el mejor de su carrera. M谩s importante a煤n, ha reducido significativamente el porcentaje de capturas, un problema que lo atorment贸 en Denver. Bajo la tutela de Tomlin, quien ha asegurado 18 temporadas consecutivas con r茅cord positivo para los Steelers, el nacido en Ohio ha vuelto a ser ese mariscal capaz de liderar un ataque cada vez m谩s inteligente. Russell marca el comp谩s. El resto disfruta bailando.
Con un r茅cord actual de 10-3, a煤n se esperan grandes desaf铆os en el horizonte. El camino no ser谩 f谩cil para Pittsburgh ni para un Russell Wilson que anhela volver a sentir la adrenalina de la postemporada. A los Steelers le espera un tramo brutal de tres partidos ante rivales que aspiran al anillo: el primero, los Philadelphia Eagles, una aut茅ntica batalla campal; luego, los Baltimore Ravens, un duelo divisional o el en茅simo sin贸nimo de guerra; y finalmente, los Kansas City Chiefs, el equipo a los que todos desean derribar.
Si Pittsburgh logra superar este tramo dif铆cil, gran parte del cr茅dito recaer谩 en un Russell Wilson que habr谩 superado el corte y concebir谩 a la 'Ciudad del Acero' como su nuevo hogar por los pr贸ximos a帽os. Es cierto que Denver ya est谩 en una nueva p谩gina con Bo Nix al mando y que, aunque el coste de liberar a Russell Wilson haya sido demasiado alto, se vuelve a demostrar que no siempre todo el dinero del mundo trae consigo la felicidad.
En Denver disfrutan teniendo a los mando un rookie y en Pittsburgh el veterano es feliz recibiendo el "m铆nimo" por parte de la franquicia acerera. La estabilidad y el 茅xito no siempre tienen precio, pero en este caso, parecen haber costado exactamente 39 millones.
De d贸lares o de sonrisas.
